EXPRESAMOS NUESTRO RECHAZO A LA LEY FICHA LIMPIA

Ficha Limpia no es más que un bonito nombre para disfrazar de justicia lo que en realidad es proscripción, porque rompe con la legislación vigente y con el precepto de Presunción de Inocencia que establece nuestra Carta Magna, ya que habilita que se pueda excluir a candidatos y candidatas procesados sin condena firme, condenados en segunda instancia sin que se hayan agotado las posibilidades de obtener justicia. Y en ese sentido, pone en manos del Poder Judicial la decisión sobre quiénes pueden participar o no de la contienda política.
Este proyecto es la continuidad y profundización de la estigmatización de la política, un plan ejecutado de manera sistemática para privar al pueblo del ejercicio de su soberanía. Con esta Ley, serán los jueces y no los partidos políticos, ni las y los ciudadanos, quienes armen las listas de candidatos.
Importantes sectores del Poder Judicial, lamentablemente, han dado muestras indubitables de connivencia con determinados sectores de la política, la economía y los medios de comunicación, lo cual le ha valido a la Justicia en general el profundo descredito que hoy tiene en la sociedad. Ese poder es el que va a definir el mapa político de la Argentina.
Hoy es obvio que la ley está dirigida contra nuestra presidenta del partido nacional Cristina Kirchner, pero nos afecta a todos, principalmente a la gente que no se siente representada por el actual Gobierno nacional.
Desde el peronismo, no podemos dejar de señalar y denunciar esta iniciativa autoritaria y antidemocrática. Nuestra historia está marcada por acciones que buscaron proscribir primero, y eliminar, más tarde, al Movimiento Nacional Justicialista, sin embargo, todos esos intentos fracasaron. Hoy vemos ese mismo espíritu de intolerancia y desprecio por la democracia reflejado en un proyecto que, por mezquindades, oportunismo y conveniencia política, el oficialismo y sus aliados han decidido defender. Seguiremos reclamando y denunciando lo que a todas luces es un intento por cercenar la democracia y crear un sistema político a la medida de los poderosos.